En Formentera, un lugar maravilloso, como un trocito de paraíso terrenal, diseñamos un plano infinito frente al mar infinito: la casa más radical que jamás hayamos diseñado. En la misma orilla del Mediterráneo, donde el mar se encuentra con la pequeña isla de Formentera, emerge una plataforma de piedra. En el punto más meridional de las Islas Baleares, mirando hacia África.

Colocamos una casa como si hubiera aterrizado en las dunas, hundiéndose ligeramente por su propio peso. Una casa que es una plataforma coronada por un plano horizontal superior. En este plano rotundamente horizontal, desnudo y despojado, nos asomamos al horizonte lejano que dibuja el mar donde se pone el sol. Un plano horizontal en lo alto construido en piedra, travertino blanco, un plano infinito frente al mar infinito. Nada más y nada menos.

Queríamos que esta casa no solo pudiera detener el tiempo, sino que permaneciera en la mente y el corazón de la humanidad. La casa sobre las dunas.